Winner of Siege of Mytra LORE Summer Edition Contest on Discord
Dear Knights and Dames!
The Summer Edition LORE Contest has ended!
We are very satisfied with the reception of the contest and we have loved all of your participations.
The winner of this edition has been ivaj8 with this epic story in Spanish that introduce new concepts for Mytra. Ideas Onikami Games fallen in love because fill some holes in the game lore and help to complete more and more the Siege of Mytra world!
Here his contribution:
Capítulo primero: La ruptura del silencio, Mades, siglo V
Abro los ojos en mitad de la noche. Un silencio sepulcral baña las puestas de sol en Mades. Somos un reino alejado del mundanal ruido puesto que colindamos con Iruma, reino de orcos, del cual nada se sabe desde hace más de 300 años. Las malas lenguas dicen que se extinguieron, hay quienes creen que se alimentan unos de otros, pero lo cierto es que nadie se ha atrevido nunca a adentrarse en esas tierras, además de estar totalmente prohibido y penado por las leyes del reino. El silencio me acompaña como fiel amigo, un silencio que se hace aún más presente en las frías noches de invierno.Comienzo a entrecerrar los ojos cuando de repente escucho un ruido atronador. No logro discernir de dónde viene, quizá son sólo temblores del suelo sobre el que yazco. Sea como fuere, me levanto dando un respingo y dirijo mis pasos hacia el bosque, de donde parece provenir ese sonido que no consigo descifrar. Mis ojos no dan crédito. Se trata de un ejército, un gran ejército que, pese a mi nula experiencia en tales menesteres (en la aldea donde vivo todos somos agricultores) soy consciente de que no es un ejército normal.Los manuscritos no albergan información sobre nada parecido, no es un ejército al uso, entre sus filas hay un destacamento de tropas que acompaña a una gran máquina de guerra que hace temblar los cimientos de la tierra. Jinetes con antorchas que hacen las veces de guía y un gran héroe acompañado de un ser de baja estatura, cuya delgada complexión hace dudar de sus virtudes como guerrero en la lucha.
Me percato de que el héroe ha dirigido su mirada hacia donde yo me encuentro. Sonríe maliciosamente y al instante deja de prestarme atención.Desconcertado y asustado por todo lo que acabo de contemplar, aprovecho la ocasión y salgo corriendo camino a casa.Mi aventura nocturna ha finalizado. Una noche que se me antojaba tranquila termina albergando demasiadas emociones para alguien como yo.Al llegar me acurruco en un lecho frío y duro y cuando estoy a punto de acompañar al dios Morfeo, exhausto por tantas emociones vividas, una imagen aparece en mi mente y rompe mi duermevela. Me doy cuenta de que Mitra está a punto de entrar en guerra y no sé cómo esa situación afectará a Mades. Pero esa es otra historia…
Capítulo segundo: Las consecuencias de un invento, Partum, siglo V
El rey Garker dio luz verde al último invento de Literium, creador del reino de Partum: la máquina de guerra. Confiando en su destreza como combatiente, destinó varias tropas a su cargo, como también al héroe Miltor, señor de la Maza Divina, para protegerlos. Partum, reino glorioso y dominante durante siglos, otorgó gran parte de su recaudación a mejoras militares. El reinado de Garker anhelaba el poder y someter bajo su yugo a diferentes reinos de Mitra. “Un rey no es tal si el resto no lo mira desde abajo”, solía sentenciar con soberbia. Una semana más tarde, Literium, poniendo su máquina de guerra a punto y convocando a un ejército de ochocientos hombres para luchar en la causa, emprendió su nueva hazaña bélica, bajo el mando de Miltor, el héroe responsable de su protección y liderazgo en aquella operación militar. El objetivo a combatir: Iruma, reino de orcos, cuyo pueblo causó varios destrozos cometidos en la Batalla del Destino del Siglo II, mermando así la gloria del reino. “Partum es glorioso y yo soy su ley pues imparto justicia con el mazo divino”, Miltor dixit.
Capítulo tercero: El resurgir de una leyenda, Iruma, siglo V
Iruma fue un reino de orgullosos y valientes orcos, cuyos habitantes vivieron en un exilio autoimpuesto desde las Guerras del Destino en el siglo II, donde exterminaron a varias razas del reino de Mitra. Vivieron en paz y armonía, abastecidos por sus propias tierras, ajenos a la batalla. Hasta entonces. Bajo el estandarte de Partum, un ejército con una extraña máquina, hizo acto de presencia, masacrando a todo orco que encontraban a su paso. Hasta llegar a Urtin, la ciudad del reino o Hueso Profundo, como la nombraban, donde adoptaron una posición defensiva para afrontar un inminente ataque. La gran suma sacerdotisa oscura, Okili Nitra, atendiendo a las necesidades de su pueblo, acechado por la masacre y el terror, decidió liberar a Gujek, un poderoso chamán que sobrevivía entre rejas después de ser engañado por la propia sacerdotisa, creyendo aquél que iba a ser obsequiado con un conjuro que le otorgaría más poder. Su anhelo quedó truncado por Okili y fue condenado a vivir toda la eternidad bajo las cadenas perpetuas ígneas. “Mi pueblo no es sólo guerra y destrucción. También anhelamos poder crear y llegar a amar, aunque sea de una extraña manera”. Okili Nitra.
Capítulo cuarto: La elección: matarlos a todos. Iruma, siglo V
— ¡Gujek, Gujek! — resonaba en mi cabeza. ¿Estoy soñando?Entreabro los ojos y siento que soy incapaz de moverme. Estoy atado a unas cadenas ígneas y vislumbro una imagen borrosa desde donde sale una voz que me llama desesperada. — Gujek, tu pueblo te necesita, ¡es la hora de despertar! — resuena la voz de esa figura que va tomando forma y se vuelve más presente y nítida.- Suma sacerdotisa, ¿qué hago encadenado? ¿Cuánto tiempo llevo aquí sin destruir el mundo?- Han pasado tres siglos, Gujek. Te engañé y encadené al sueño eterno por el bien de nuestro pueblo. — ¿Por su bien? ¡El pueblo necesita al chamán, a su líder, quien le guía en las batallas! — grita.- Tal vez me equivoqué, Gujek, por eso te he despertado.- ¿Has necesitado trescientos años para llegar a tal conclusión? Ahora te haré sufrir durante seis siglos, el doble del tiempo que me has tenido encarcelado en esta cueva.- Aceptaré las consecuencias de mi decisión, Gujek, pero tu pueblo está muriendo. El ejército de Partum ha venido a destruirnos. El chamán asintió y al salir de la cueva y poner rumbo a su misión más importante, la realidad golpeó su orgulloso corazón. No podía creer lo que sus ojos veían: no sólo su pueblo estaba perdiendo la guerra, si no que era débil, sin apenas armas ni habilidades para la batalla. Había perdido la llama de la lucha, el fuego en sus ojos… el orgullo como estandarte de su raza. Desde donde se encontraba, Gujek mantenía una posición privilegiada que le permitía observar casi toda la ciudad a sus pies. Y así, habló a su pueblo, desde la rabia y la tristeza que le provocaba aquella imagen.
- ¡Orcos de Iruma! He permanecido tres siglos encadenado en un letargo que parecía eterno y al despertar no podía creer lo que veían mis ojos. Un pueblo débil en la lucha contra unos simples humanos. Cada uno de vosotros tiene la fuerza de cinco hombres. ¡Honrad a vuestro pueblo y luchad! Después de pronunciar tal discurso, el chamán giró sobre sí mismo, dando la espalda al pueblo de Iruma, y continuó su camino.Okili Nitra, la suma sacerdotisa, intentó, sin resultado, hacerle entrar en razón. — Ya es tarde, has matado a tu pueblo en vida — contestó Gujek.
El ejército de Partum tomó la ofensiva y, utilizando la máquina de guerra, lanzó un proyectil de fuego apuntando hacia la posición de Gujek. Las consecuencias del ataque fueron tales que el chamán no daba crédito. Jamás, en todos los años de vida y guerra que llevaba a sus espaldas, había visto nada igual. Fuego, caos y destrucción vestían esta nueva Iruma devastada. Al ver en lo que se había convertido su pueblo, toda esa rabia y frustración le hicieron tomar una decisión: anhelaba destruirlo todo y enfrentarse al ejército de Partum y su máquina de guerra tan poderosa.Se dirigió hacia la zona de batalla y con las pocas energías chamánicas que aún le quedaban, invocó una tormenta que detuvo por momentos la lucha entre los dos bandos. Era una simple estratagema para ganar tiempo y así acceder al poder helado. La tierra bajo sus pies comenzó a congelarse y, dibujando una elipse con sus brazos dirigidos hacia ese cielo encapotado, hizo caer un témpano de hielo, un enorme monolito que albergaba vida. Gujek, sonriendo, dijo: — Es hora de volver a arrasar — . Entonces separó sus manos y las unió en un estruendo seco tal que simuló la fuerza de un trueno. El monolito se astilló, abriéndose poco a poco en canal, dando lugar a una brecha por la que el chamán introdujo su poderosa mano, diciendo: — Reliquia ancestral, Hacha del Hielo, ¡otórgame tu poder! — Un halo de luz azulada iluminó al chamán, provocando una inminente metamorfosis que transformó su escuálido cuerpo de rehén en un musculoso y fornido hombre de mirada hipnótica. — Si anheláis la muerte como seres insignificantes, quedaos. Si buscáis la gloria, ¡despertad y seguidme! — dijo Gujek, dirigiéndose al pueblo de Iruma.Tras estas palabras, el chamán, con la fuerza de mil hombres, corrió hacia el ejército enemigo, seguido de un pueblo que había recobrado el ímpetu y orgullo de antaño.
El portador del Hacha Helada consiguió alcanzar, en un salto digno de un dios a la poderosa máquina de guerra, de un ataque la dejó congelada e inservible. Gracias a la recién adquirida fuerza del pueblo de Iruma, que se había convertido en una horda de orcos iracundos, y junto al poder de Gujek, el ejército de ochocientos hombres, a cada paso, iba perdiendo fuelle y mermando sus fuerzas. La batalla casi había llegado a su fin, la victoria de Iruma era inminente, cuando el gran chamán se percató de la presencia de dos figuras humanas en lo alto de la montaña.Con la rabia de un berseker se dirigió hacia ellos y lanzó un ataque congelante capaz de destruirlo todo. Pero cuál fue su sorpresa cuando vio una luz dorada, que provenía de una maza y que repelió su ataque. Al reparar en esto, tanto el héroe de la maza como la figura del hombre habían desaparecido.Este acontecimiento inesperado hizo pensar al chamán que tal vez todo aquello no era una guerra como tal, tan sólo buscaban poner a prueba sus armas, y que quizás al pueblo de Iruma aún le quedaban muchas batallas por librar y grandes sorpresas por vivir. Gujek, consciente de los acontecimientos que estaban por llegar, llenó sus pulmones de oxígeno y gritó a viva voz: — ¡Arrasaré con todo, hasta que sea el frío hielo lo último que sienta tu cuerpo! —
Fin
The LORE Contest winner will received from our team:
- $50 in WAX token.
- 1 x Regular War Machine NFT
- Assignment of the Discord role “LORE Master” dedicated exclusively to the winners of the LORE contest and derivatives.
- Exclusive Hero’s Skin only available for Art and Lore Masters (this skin will be airdroped between August and September)
- Proudly member in game credits as LORE Master.
And the winner of 1x Classic Booster Pack is… solracvii9!
About Siege of Mytra
Siege of Mytra is an asynchronous-RPG strategy mobile video game based on the WAX blockchain. Take control of your Heroes, build your front of troops and mercenaries, destroy the enemies’ Castles, get resources and rank on the Siege of Mytra Community Ranking to win prizes on NFTs and $DOBLON token.
Immerse yourself in a fantastic medieval world designed in pixel art and traditional 2D illustrations.
Discover more about this project in our website: http://siegeofmytra.com/
Coming Next…
Hodl Event still LIVE! Up to $400 worth of WAX and NFTs available for Siege of Mytra Packs holders!
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We will share more new content for the WAX community in the next articles, new designs, game mechanics, campaigns and much more, but don’t miss to join the Game Discord server and share your impressions about the game!
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